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Guias e Dicas
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GAMBLE, Clive. Arqueologia - Basica , Notas de estudo de Antropologia

Arqueologia Básica

Tipologia: Notas de estudo

2016
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Compartilhado em 18/03/2016

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Baixe GAMBLE, Clive. Arqueologia - Basica e outras Notas de estudo em PDF para Antropologia, somente na Docsity! Diseiio de la cubierta: Joana Gironella Título original: Archacologr: the basics “Traducción de J BALLARI |: edición: octubre de 2002 2. edición: abril de 2008 € 2001: Clive Gamble Authorised translation from English language edition published by Routledpe, a member of Tavlor & Francis Group Derechos exclusivos de edición en espaiiol reservados para todo el mundo » propiedad de la traducción: € 2002 y 2008: Editorial Ariel, S. A, Avda. Diagonal, 662-664 - 08034 Barcelona ISBN 978-84-344-6679-1 Depósito legal: B. 18.146 - 2008 Impreso en Espana por Book Print Digital Botânica, 176-178 08901 L Hospitalet de Llobregat Queda rigurosamente prohibida. sin la autorizacián escrita de los titulares del copyright, bajo las s s establecicas AGRADECIMIENTOS Entre las muchas personas que en los últimos 30 afios han esti- mulado mi interés por la arqueologia quisiera singularizar en este mo- mento las siguientes por haber participado de alguna forma u otra en este proyecto: Vicky Peters de Routledge por sugerirme la idea y Polly Osbom y Julene Barnes por seguir el proyecto hasta que se terminó; Chris Gosden, Randy McGuire y Tim Darvill, por haber leído el ma- nuscrito y por sus consejos; Penny Copeland que lo ilustró; mis estu- diantes, que podrán decir que todo eso ya les suena de algo; y mis ami- gos y colegas de la Universidad de Southampton, en particular Justin Dix, Yvonne Marshall, David Peacock, Simon Keay, Thomas Dowson, Martin Millett, David Hinton, John Robb, Dave Wheatley, Elaine Morris, Stephanie Moser, Jon Adams, Tim Champion, John McNabb y James Steele, así como los que se fueron con la música a otra parte, Colin Renfrew, Arthur ApSimon, Brian Sparkes, Stephen Shennan, Peter Ucko, J. D. Hill y Julian Thomas. También he de agradecer a la Universidad de Southampton por su ayuda financiera y por conce- derme un permiso para poder trabajar. Finalmente debo una disculpa a Melissa Gamble y a Tom Gamble que finalizaron sus estudios de ar- queologfa antes de que yo pudiese acabar este libro: el pasado siem- pre está ahí a la espera, CAPÍTULO 1 «QUÉ ES LA ARQUEOLOGÍA? La imaginación arqueológica Arqueologfa rima con emoción, con curiosidad intelectual y con la manera de transformar esta curiosidad en conocimiento. Es un tipo de emoción que nos invade cuando usamos lo que Julian Thomas (1996: 63) lama, en frase prestada, «nuestra imaginación arqueológica». Esta facultad nos permite llegar a un lugar al que nunca viajaremos, el pasado, y pensar sobre el tiempo y los obje- tos de forma muy diferente a como lo hacemos en nuestras vidas corrientes. La imaginación arqueológica ha de ser tan antigua como la es- pecie humana. A un cierto nivel se trata de algo parecido a la ha- bilidad que damos por supuesta en el individuo, de poder recons- truir lo que ha sucedido a partir del rastro dejado; huellas en el suelo que apuntan a una visita, una habitación con restos de co- mida, vasos y botellas que indica que allí se ha celebrado algo. A otro nivel, esta imaginación se ha agudizado y refinado durante los úl- timos 200 afios hasta convertirse en una disciplina profesional. Éste es el sentido que voy a dar a la frase a lo largo del libro. En nues- tro tiempo se excavan, miden, catalogan, describen y analizan de forma rutinaria los objetos y monumentos del pasado. Y más im- portante aún, se ha desarrollado una forma de conocimiento, con la ayuda de estos métodos, mediante la cual poder representarnos un esquema de las cosas que han desaparecido, De eso trata preci- samente la emoción que produce la arqueologia. El descubrimiento de tumbas no saqueadas es algo fantástico, pero la exploración de nuestra capacidad de pensar más allá de la experiencia cotidiana y de incorporar a nuestras vidas las actividades y los objetos de gente que ya no existe, constituye sin duda también una forma de enri- quecimiento. 14 ARQUEOLOGIA BÁSICA Tres contextos políticos La arqueologia surgió de forma gradual a lo largo de los dos úl- timos siglos como una forma de estudio sistemático del pasado. La di- mensión tiempo es aquí fundamental. Es un indicador de las fuerzas que crearon la disciplina y que siguen sosteniéndola como actividad. Lo que más impulsó el desarrollo de la arqueologia fue el nuevo orden político, social y económico que emergió de la revolución in- dustrial, primero en Europa y luego en América del Norte. Bruce Trigger (1989) ha identificado tres contextos políticos (recuadro 1) relaciona- dos con esta revolución que han afectado directamente a la imagina- ción arqueológica. Por medio de organizaciones como el World Archaeological Congress y su prolífica producción literaria recogida por la colección One World Archaeology, se ha generado una reacción a ciertos elementos del tercer contexto. En estas «Naciones Unidas» de la arqueologia se estimulan en vez de excluirse los puntos de vista alternativos sobre la disciplina. Es como un foro a disposición de distintas lecturas y usos, a menudo contradictorios, del pasado. Sus participantes proceden de los tres contextos políticos serfialados por Trigger, de modo que con esta dinâmica se crea una nueva ortodoxia. eCómo empezó todo? El estudio de la historia de la arqueologia es un ámbito de inves- tigación que ha surgido no hace mucho tiempo de las crónicas de los grandes hallazgos y de una galería de personajes excéntricos, y reper- cute sobre los distintos movimientos que originaron y siguen nutriendo la disciplina (Trigger, 1989). Volveré a hablar de estas fuerzas en los próximos capítulos, especialmente en el capítulo 8 cuando discuta so- bre nacionalismo y etnicidad. Una buena forma de abordar la cuestión es ver cómo las cosas del pasado, los monumentos y las ciudades antiguas, así como los ob- jetos excavados para el comercio de antigiiedades, se transformaron en información sobre el pasado. Ello fue posible gracias a la aplicación de métodos propiamente arqueológicos (para una descripción extensa véase D. H. Thomas, 1998: 332). Hay dos métodos que destacan en este sentido: el análisis del estilo (véase capítulos 3 y 5) y la seriación. Estos métodos se basan en los principios de frecuencia de aparición y estrati- grafia (capítulo 3) siendo parte esencial de los mismos. Estos métodos y principios constituyeron los componentes básicos del aprendizaje de la imaginación arqueológica (recuadro 2) durante su etapa infantil. «QUÉ ES LA ARQUEOLOGIA? 17 afios se empezó a trabajar en las ciudades mesopotámicas de Nínive y Nimrud. Hubo que descifrar las lenguas de estas antiguas civilizaciones, lo que se consiguió en 1802 para la escritura egipcia y en 1857 para la babilónica y asiria. Una vez descifradas las lenguas, las listas de reyes y faraones proporcionaron la cronología de los tesoros que evidencia- ban los logros cívicos y artísticos de estos pueblos. CHRISTIAN THOMSEN Y EL SISTEMA DE LAS TRES EDADES La mayor parte de los trabajos de investigación de esta época pio- nera se basaba en los textos y no en los objetos. El interés se centró en la historia, no en la prehistoria (véase Andrén, 1998). Pero en 1819 se produjo un hecho crucial: la clasificación por parte de C. J. Thomsen de las colecciones del Museo Nacional de Antigiiedades de Copenhague según un modelo cronológico de tres edades. Puesto que Thomsen ma- nejaba objetos de la prehistoria, su esquema trasladó la imaginación arqueológica fuera de los textos. Thomsen, no podía obtener infor- mación de calendarios o de listas de reyes para moverse por aquel mundo, de modo que los aspectos cronológicos debfan obtenerse de otra forma. En primer lugar fue la tecnología lo que le proporcionó la base para clasificar los materiales en edades sucesivas: Piedra, Bronce y Hierro, Le siguió la seriación, aunque él no la llamó de este modo. Tomó los descubrimientos depositados en el museo y se fijó en cómo variaban las proporciones de cada elemento en las distintas coleccio- nes. Ello le permitió establecer qué era lo que estaba asociado a qué, asf como darse cuenta de los cambios. Los elementos comunes a los distintos tipos de objetos confirmaron la clasificación tecnológica bá- sica. Es por esta razón y no por la suposición afortunada de que la pie- dra viene antes que el bronce y el bronce antes que el hierro en la his- toria de la tecnología, que el modelo de las tres edades ha soportado la prueba del tiempo. El modelo de Thomsen representa un magnífico ejemplo de in- vestigación empírica e inductiva que conduce al desarrollo de una cla- sificación a partir de la observación de los rasgos característicos pre- sentes en los materiales. De su célebre guía de las colecciones del museo, publicada en 1836, emerge la idea de que para idear su esquema, Thomsen dio gran importancia a los contextos y a las asociaciones de objetos. A este respecto, su interés por las monedas pudo darle la ins- piración necesaria para observar el cambio estilístico en los objetos de la prehistoria. Tal como puntualiza Trigger (1989: 84), Thomsen no tomó prestado de la geología su método de datación, sino que desarrolló 18 ARQUEOLOGÍA BÁSICA una técnica nueva, la seriación de tipos, que resultó apropiada para el estudio de los materiales de la prehistoria. Además, nunca dio la im- presión de haber sido influenciado por Adam Smith o Thomas Malthus, quienes conjeturaron entre 1763 y 1798 que la sociedad había progre- sado por medio de etapas —la edad de los cazadores, luego la de los pastores, luego la de los agricultores y finalmente la edad contempo- ránea suya de los comerciantes—. Si así hubiese sido, debería decirse que su esquema fue deductivo puesto que habría contrastado una hi- pótesis —la naturaleza progresiva del cambio social — con observa- ciones arqueológicas. Fue lo que hicieron otros como Sir John Lubbock (1865), mientras que E. B. Tylor (1865) y Lewis Henry Morgan (1877) crearon esquemas similares a base de ordenar las culturas contempo- ráneas del mundo según una escala ascendente, infiriendo una orde- nación de los ancestros. iDe qué forma ha cambiado la arqueologia? Los principios de frecuencia de aparición y estratigrafía, los mé- todos de seriación y el análisis estilístico de los tipos de objetos (véase recuadro 2) fueron las principales líneas de progreso. Hoy día dispo- nemos de técnicas científicas para conocer la edad de un edificio o de un hueso (capítulo 3). Pero los métodos que utilizan el tiempo y el es- pacio como marco para dividir la línea continua que es el pasado en categorias, fueron descubiertos hace más de 150 afios. Mientras tanto los arqueólogos no sólo han mejorado las técni- cas del análisis estilístico y registrado sus secciones estratigráficas con más precisión. La disciplina también ha cambiado al calor del cam- biante clima social, político y económico. Muchas de sus aspiracio- nes actuales no las entenderían de ninguna forma los padres funda- dores como Thomsen o Lubbock. LA ARQUEOLOGIA ANTROPOLÓGICA El gran cambio ha venido de la mano de la arqueología antropo- lógica, que se ha desarrollado durante los últimos 40 afios. Se trata de un paraguas amplio en el que caven la mayorfa de los enfoques que se examinan en el capítulo 2. Ciencia, teoría, relevancia, cuantifi- cación, e interpretación son algunas de las palabras clave asociadas a la arqueologia antropológica. Antes de su aparición la práctica de la arqueologia estuvo dominada por la historia cultural. Colin Renfrew (1982: 6) se ha referido con razón al período que va de 1880 a 1960, «QUÉ ES LA ARQUEOLOGIA? 19 Recuadro 3: Cuatro características de la arqueologia actual (Orser, 1999) Se tlende a una vislón de conjunto: Aunque se estó excavando en un yacimiento particular en cada momento, el objetivo es situarlo en un marco general de dimensiones globales. Hay que mirar más allá de los límites fisi- cos en que se enmarcan los datos obtenidos para comprender su significa- ción (capítulo 6). Busca la relación entre seres humanos: Orser explica que el conte- nido básico de la vida humana en cualquier tiempo y lugar está hecho de re- laciones, relaciones que son sociales. La mejor manera de concebir estas relaciones es pensando en la noción de red (capítulo 6). Estas tramas o re- des son de distinto tipo y se superponen y cambian. De ahí que estén mu- tuamente interrelacionadas. Trabaja a diferentes niveles: ; Cómo cubrimos el abismo que separa unos simples restos de cerâmica de la civilización a la que pertenecieron (capítulo 4)? ; Cómo hacemos que concuerde la microescala de la actividad cotidiana de alguien que fabrica un recipiente con la experiencia a largo plazo y a otra escala, de la formación y el colapso del Imperio Maya (capítulo 7)? Es reflexiva: Nos hemos dado cuenta de que los datos arqueológicos no son simples curiosidades sino un poderoso instrumento del conocimiento en manos de la gente de hoy. La reflexión sobre el trabajo que realizan per- mite a los arqueólogos evaluar el sentido de sus proyectos de investigación y el impacto que pueden ejercer sobre la gente. Destaca a este respecto el eco alcanzado por el impacto que tiene la arqueologia sobre los aboríge- nes australianos, por ejemplo, pueblo que hasta el momento no habia tenido voz en la investigación e interpretación de su pasado. La exigencia de de- volución de bienes culturales y las reivindicaciones sobre identidad étnica de los vestígios arqueológicos son otros ejemplos al respecto (capítulo 8). justo antes de la entronización de la arqueologia antropológica, como el período del «largo sueho de la teoria arqueológica». La historia cul- tural empezó con Thomsen, progresó con el pensamiento evolucionista del siglo x1x, y sigue en nuestro tiempo enfatizando los elementos re- lativos al progreso, la descripción, la datación y la etnicidad. Cuarenta afios después Charles Orser (1999: 280-1) sintetiza los cambios habidos en la arqueologia a lo largo de los últimos tiempos con una visión globalizadora (recuadro 3). 22 ARQUEOLOGIA BÁSICA las pieles que servían de vestido (Gifford-González, 1993; Moser, 1998). Este esencialismo sirve a menudo para establecer clasificaciones, y es particularmente fuerte en arqueologfa. Las cosas se explican en fun- ción de las propiedades o esencias que se piensa que de entrada ponen de manifiesto. Fue la intuición de Charles Darwin la que desafió al esencialismo inherente en biologia. Su mecanismo de selección natural (capítulo 2) dio un vuelco a la vieja idea del carácter permanente de las especies porque estaban hechas de un conjunto de esencias. Por ejemplo, las viejas ideas explicarían los rasgos esenciales de un ratón doméstico como un conjunto de bigotes, cola larga y afición por el queso. Darwin demostró que tales esencias que producen el tipo ideal de ratón do- méstico no tienen un carácter permanente, sino que pueden cambiar debido a procesos de selección. Un ejemplo de este tipo de procesos que se han producido a lo largo de milenios, se ve en los granjeros que han ido selectivamente criando vacas cada vez más grandes para hacer más queso, y posiblemente gatos más listos, lo que a su vez modificó las presiones selectivas sobre los ratones. Los arqueólogos han basado también sus clasificaciones en el des- cubrimiento de tipos ideales. En las próximas páginas veremos cómo se llega a la idea de que en el Sutton Hoo una combinación de objetos es capaz de exudar pura «esencia de realeza», como si fuera un espray con perfume. En el capítulo 5 examinaré de qué manera nuestro con- cepto clave de estilo se basa también en las esencias que esperamos que contengan los objetos, en vez de pensar que aquel está en función de que el objeto forme parte o no de una red de relaciones sociales. Cambios en la forma de ver a los anglosajones: un caso a estudiar En los últimos 50 afios el paso de una arqueologia basada en la his- toria cultural a una arqueologia antropológica queda bien ilustrado por las tres principales investigaciones dedicadas al yacimiento anglosajón de Sutton Hoo, situado en Suffolk, al este de Inglaterra (Carver, 1998). EL ESPÍRITU DEL LUGAR Este cementerio anglosajón con sus montículos y sus restos de asentamientos de época prehistórica, fue expoliado por ladrones de tum- bas en el siglo xvi y por anticuarios del siglo x1x. Todo lo que sabemos de entonces es que el yacimiento fue agujereado por los expoliadores. «QUÉ ES LA ARQUEOLOGIA? 23 Nuestro conocimiento sobre lo que dejaron empieza cuando la se- fiora Edith Pretty, conocida espiritualista, decide en 1938 hacerse con los servicios de un arqueólogo aficionado llamado Basil Brown, para que investigue qué hay debajo de los montículos que asoman en su propiedad de Sutton Hoo. Brown abrió varias zanjas y en 1939 exhumó los restos de un barco anglosajón que había sido varado en tierra seca para servir hacia el ao 1300 de ataúd de un personaje. Bastantes afios antes del invento de la CNN un hallazgo tan es- pectacular sólo despertó el interés de un pequefio grupo de arqueólo- gos. Pero a la vista de la importancia nacional del descubrimiento, las autoridades representadas por el Museo Británico y el Ministerio de Fomento sustituyeron al sefior Brown por un experto nacional, el ar- queólogo de Cambridge Charles Phillips, con el encargo de excavar la câmara funeraria situada en el interior del barco. Éste convocó a sus colaboradores Stuart Piggot y W. F. Grimes, que más tarde serían profesores respectivamente de las universidades de Edimburgo y Londres. El ajuar formado por 263 objetos entre los que se incluían fuen- tes de plata de Constantinopla, collares de oro exquisitamente traba- jados, insignias reales, una lira y el casco y la espada del difunto, se recuperó en sólo 17 días de trabajo durante el verano en que Inglaterra declaró la guerra a Alemania. Como explica Carver: Fue una de estas excavaciones mágicas que sólo a unos pocos pri- vilegiados les toca en suerte de poder disfrutar: en que cada día trae un nuevo descubrimiento y cada hallazgo hace alborear al siguiente. Son momentos de disciplinada tensión que hacen que uno apriete los labios, al tiempo que se dibuja y se fotografia, a lo que siguen unos gritos so- focados fruto de la excitación y unas cortas frases de júbilo, mientras se intenta refrenar la imaginación por lo que pudiera pasar en el instante anterior al momento comprometido de levantar el objeto del suelo (Carver, 1998: 16). Luego, en lo que todavía sigue siendo el mayor acto individual de generosidad relacionado con la excavación de un tesoro arqueoló- gico, la sefiora Pretty donó la colección completa a la nación sin pe- dir nada a cambio. CIENCIA Y ERUDICIÓN ALREDEDOR DE SUTTON Hoo La segunda campafia fue más lenta. Dirigida por el Dr. Rupert Bruce-Mitford del Museo Británico, fue llevada a cabo de forma me- ticulosa, científica y resultó ejemplar. Si la consigna en 1939 había sido 24 ARQUEOLOGIA BÁSICA recuperación y toma apresurada de datos, en la investigación de Bruce- Mitford de 1965 y 1971 la consigna fue autenticidad y esmero. No se trató de un enfoque antropológico, sin embargo. El barco fue excavado de nuevo y los objetos que se hallaron fueron estudiados otra vez y re- construidos. Los vertidos de tierra de Brown fueron examinados para asegurarse de que nada quedara al aire. Se hicieron copias de los ob- jetos y todo quedó registrado en tres gruesos volúmenes completados en 1983, En esta ocasión la arqueologfa científica jugó su papel e hizo po- sible que se alcanzaran los objetivos de corrección y autenticidad. Por ejemplo, entre los objetos recuperados habfa un pequefio ciervo de bronce que inicialmente se había pensado que remataba el casco. Pero cuando se analizó la composición de la aleación de la figurilla, la del propio casco y la del metal que sujetaba una piedra de afilar, se comprobó que la figurilla debta asociarse con este último objeto. Y es así como se puede ver actualmente en el Museo Británico, donde se conoce como el «cetro» del Rey. Sutton Hoo EN LA ERA DE LA GESTIÓN eQué quedó por descubrir? La tercera y última campaíia de in- vestigación empleó métodos científicos avanzados de prospección y se valió de nuevas técnicas de excavación, Y, lo que es más importante, los arqueólogos se plantearon nuevas preguntas. El paisaje de Sutton Hoo con sus evidencias de ocupaciones sucesivas fue el foco de aten- ción y no los montículos. Las campafias desarrolladas entre 1983 y 1992 fueron dirigidas por Martin Carver. Su propuesta de investigación fue seleccionada me- diante una convocatoria abierta lanzada por el comité nacional de ges- tión responsable del yacimiento. Fue el primer proyecto arqueológico británico que tuvo un diseão de proyecto que fue presentado pública- mente y que fue sometido a escrutinio público. Las preguntas que plan- teaba requerían obtener una información a lo largo de unas fases de «evaluación» y «estrategia» que se tenfan que llevar a cabo necesa- riamente antes de empezar a excavar (Carver, 1998: 176). Las diferen- cias con lo sucedido en 1938 son evidentes, cuando había sido la cu- riosidad y quizás un cierto espiritualismo lo que motivó la investigación, e incluso con relación a 1965, cuando los planes de investigación sólo eran conocidos por los Ilamados a desarrollarlos. El proyecto de Carver, en cambio, se enmarcaba en los cambios que la arqueologia británica había asumido si quería tener un futuro. La consigna en esta tercera fase fue gestión y rendición de cuentas. «QUÉ ES LA ARQUEOLOGIA? 27 La lección que llevamos a casa de todo ello es que los arqueólo- gos ya no excavan simplemente. Nuestras campafias crean símbolos que la gente utiliza para hacer frente a los problemas que inquietan a nuestra época (capítulo 8). La cafeteria arqueológica: ;se trata realmente de arqueologia? En este momento estarás probablemente pensando, estimado lec- tor, que la respuesta a la pregunta gqué es la arqueologfa?, es más com- plicada de lo que parecia. «Qué fue lo que disparó tu imaginación ar- queológica para que pudieras descubrir que lo que late en la arqueologia que está más allá de lo corriente, del sentido común y de lo familiar? cSe trata de Lara Croft o de Gladiador? cDe un atardecer en el Valle de los Reyes o de un amanecer en Petra, junto al Jordán? ;De un bip bip de tu detector de metales? Se trata de las piedras de Stonehenge, los montículos de Moundville o las Termas Romanas de Bath? Deja que intente dar una primera definición y luego un menú que te preparará para abordar convenientemente equipado la arqueologia. — La arqueología tiene que ver básicamente con tres cosas: ob- jetos, paisajes y lo que hacemos con todo ello. Es tan sencillo como decir que se trata de estudiar el pasado mediante los res- tos materiales que se conservan. En lo que queda de libro voy a ampliar esta definición a base de examinar los aspectos más importantes que emergen de la misma: los objetos (que van de una punta de flecha a una ciudad entera), el tiempo y el espacio, la gente, el cambio y la estabilidad, y la identidad. Lo que en la realidad hacen los arqueólogos es ya otra cuestión y muy variada. Definir un arqueólogo como alguien que estudia el pa- sado es simplificar demasiado las cosas. La profesión, aunque humilde en número de practicantes, tiene sus asociaciones profesionales y su gama de intereses y preocupaciones. El pasado no es algo remoto sino que forma parte de nuestras vidas. Las cuestiones que plantean los arqueólogos sobre métodos de investigación, identidad y pertenencia, dan pie a menudo a ser contestadas de forma contundente; que es lo que acostumbran a hacer los propios colegas a través de asociaciones y tribunas diversas, sea de forma hostil o de forma amigable. éPero qué puedo hacer para proporcionaros una cata a modo de aperitivo de los tipos y variedades de arqueología que se ofrecen en el menú? Internet sería una buena forma de empezar. Teclead arqueolo- gía en un buscador cualquiera y esperad a ver lo que sale. En el mes de diciembre de 1999 con Yahoo encontré casi mil sitios y más de cien 28 ARQUEOLOGÍA BÁSICA Recuadro 4: Lista de materias relacionadas con la arqueologia que aparecen en la oferta de estudios de las universidades del Reino Unido (1999) Teoria y técnicas Teoria arqueológica * Historia del pensamiento arqueológico * Arqueologia social * Arqueologia antropológica * Identidad (incluye género, etnicidad y nacionalismo) * Filosoffa de la arqueologia (incluye arqueologia interpretativa, posproce- sualismo y teoría social) * Arte y representación * Cultura material Arqueologia de campo * Arqueologia de los edificios * Excavación * Arqueologia del paisaje * Arqueologia submarina Arqueologia ambiental! * Fauna * Botânica * Paisaje, suelos y geomoriologia Tecnologia y ciencia de los materiales * Lítica * Cerámica y vidrio * Metalurgia Datación científica Antropologia biológica * Osteologia y paleopatologia * Arqueologia de la medicina legal Informática y estadística arqueológica Prospección arqueológica «QUÉ ES LA ARQUEOLOGIA? Recuadro 4 (continuación) Conservación arqueológica Interpretación y gestión del patrimonio Períodos y ámbitos territoriales Origenes humanos Arqueologia de las Islas Británicas * Paleolítico y Neolítico * Edades del Bronce y del Hierro * Época romana * Medieval * Posmedieval e Industrial Arqueologia mediterránea y europea * Paleolítico y Neolítico * Edades dei Bronce y del Hierro * Época grecorromana * Medieval * Posmedieval e Industrial Arqueologia e historia de las civilizaciones antiguas * Anatolia * Oriente Medio * Egipto * Nuevo Mundo * Sur de Asia e India Prehistoria del mundo y arqueciogia precolonial * Átrica * Continente americano * Este y sudeste de Asia * Sur de Asia e India * Pacífico y Australasia Arqueologia histórica y etnohistórica “ África * Continente americano * Este y sudeste de Asia * Sur de Ásia e India * Pacífico y Australasia 29
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